<html><body><div style="color:#000; background-color:#fff; font-family:lucida console, sans-serif;font-size:14pt"><div><span style="font-size: 12pt; font-family: 'times new roman', 'new york', times, serif;">Hola, </span></div><div style="color: rgb(0, 0, 0); font-size: 12pt; font-family: 'times new roman', 'new york', times, serif; background-color: transparent; font-style: normal;"><span style="font-size: 12pt; font-family: 'times new roman', 'new york', times, serif;">El proper dissabte 12 d'octubre, farem una botifarrada contra la hispanitat a davant de l'Ateneu la Pigassa, a la Pobla de Segur.</span><br></div><div style="font-family: 'lucida console', sans-serif; font-size: 14pt;"><div style="font-family: 'times new roman', 'new york', times, serif; font-size: 12pt;"><div class="y_msg_container"><div id="yiv6520781491"><div dir="ltr"><div><div>Us podeu apuntar a ateneulapigassa@gmail.com o per telèfon al 973662066 .<br>
<br></div>Feu-n'hi difusió i animeu-vos a venir!<br><br></div><div>Salut<br></div><div><br><br></div>P D, afegeixo una carta que Luís Brito va escriure l'any del 500 "aniversari" del descobriment d'America, en que un hipotètic indi, Guaicaipuro Cuatémoc, reclamava el pagament del deute a europa.<br>
<br><br>Aquí pues yo, Guaicaipuro Cuautémoc, he venido a encontrar a los que
celebran el Encuentro. Aquí pues yo, descendiente de quienes poblaron
América hace cuarenta mil años, he venido a encontrar a los que se la
encontraron hace quinientos. Aquí pues nos encontramos todos: sabemos lo
que somos, y es bastante. Nunca tendremos otra cosa.<br>
El hermano aduanero europeo me pide papel escrito con visa para poder
descubrir a los que me Descubrieron. El hermano usurero europeo me pide
pago de una Deuda contraída por Judas a quienes nunca autoricé a
venderme. El hermano leguleyo europeo me explica que toda Deuda se paga
con intereses, aunque sea vendiendo seres humanos y países enteros sin
pedirles consentimiento. Ya los voy descubriendo.<br>
También yo puedo reclamar pago. También puedo reclamar intereses. Consta
en el Archivo de Indias, papel sobre papel, recibo sobre recibo, firma
sobre firma, que sólo entre el año de 1503 y el de 1660 llegaron a
Sanlúcar de Barrameda 185 mil kilos de oro y 16 millones de kilos de
plata provenientes de América. ¿Saqueo? No lo creyera yo, porque es
pensar que los hermanos cristianos faltan a su séptimo mandamiento.
¿Expoliación? Guárdeme Tonantzin de figurarme que los europeos, igual
que Caín, matan y después niegan la sangre del hermano. ¿Genocidio? Eso
sería dar crédito a calumniadores como Bartolomé de las Casas, que
califican al Encuentro de Destruición de las Indias, o a ultrosos como
el doctor Arturo Uslar Pietri, quienes afirman que el arranque del
capitalismo y de la actual civilización europea se debió a esa
inundación de metales preciosos.<br>
No: esos 185 mil kilos de oro y 16 millones de kilos de plata deben ser
considerados como el primero de varios préstamos amigables de América
para el desarrollo de Europa. Lo contrario sería presuponer crímenes de
guerra, lo cual daría derecho, no sólo a exigir devolución inmediata,
sino a indemnización por daños y perjuicios. Yo, Guaicaipuro Cuautémoc,
prefiero creer en la menos ofensiva de las hipótesis. Tan fabulosas
exportaciones de capital no fueron más que el inicio de un Plan
Marshalltzuma para garantizar la reconstrucción de la bárbara Europa,
arruinada por sus deplorables guerras contra los musulmanes, cultores
del álgebra, la poligamia, el baño cotidiano y otros logros superiores
de la civilización.<br>
Por ello, llegado el Quinto Centenario del Empréstito, podemos
preguntarnos: ¿han hecho los hermanos europeos un uso racional,
responsable, o por lo menos productivo de los recursos tan generosamente
adelantados por nuestro Fondo Indoamericano Internacional?<br>
Deploramos decir que no. En lo estratégico, los dilapidaron en batallas
de Lepanto, Armadas Invencibles, Terceros Reichs y otras formas de
exterminio mutuo, sin más resultado que acabar ocupados por las tropas
gringas de la OTAN, como Panamá (pero sin canal). En lo financiero, han
sido incapaces -después de una moratoria de 500 años- tanto de cancelar
capital o intereses, como de independizarse de las rentas líquidas, las
materias primas y la energía barata que les exporta el Tercer Mundo.<br>
Este deplorable cuadro corrobora la afirmación de Milton Friedman según
la cual una economía subsidiada jamás podrá funcionar. Y nos obliga a
reclamarles -por su propio bien- el pago del capital e intereses que tan
generosamente hemos demorado todos estos siglos. Al decir esto,
aclaramos que no nos rebajaremos a cobrarles a los hermanos europeos las
viles y sanguinarias tasas flotantes de interés de un 20% y hasta un
30% que los hermanos europeos le cobran a los pueblos del Tercer Mundo.
Nos limitaremos a exigir la devolución de los metales preciosos
adelantados, más el módico interés fijo de un 10% anual acumulado
durante los últimos trescientos años.<br>
Sobre esta base, y aplicando la europea fórmula del interés compuesto,
informamos a los Descubridores que sólo nos deben, como primer pago de
su Deuda, una masa de 185 mil kilos de oro y otra de dieciséis millones
de kilos de plata, ambas elevadas a la potencia de trescientos. Es
decir: un número para cuya expresión total serían necesarias más de
trescientas cifras, y que supera ampliamente el peso de la tierra. Muy
pesadas son estas moles de oro y de plata. ¿Cuánto pesarían, calculadas
en sangre?<br>
Aducir que Europa en medio milenio no ha podido generar riquezas
suficientes para cancelar este módico interés, sería tanto como admitir
su absoluto fracaso financiero y/o la demencial irracionalidad de los
supuestos del capitalismo. Tales cuestiones metafísicas, desde luego, no
nos inquietan a los indoamericanos. Pero sí exigimos la inmediata firma
de una Carta de Intención que discipline a los pueblos deudores del
Viejo Continente, y los obligue a cumplirnos sus compromisos mediante
una pronta Privatización o Reconversión de Europa, que les permita
entregárnosla entera como primer pago de su Deuda histórica.<br>
Dicen los pesimistas del Viejo Mundo que su civilización está en una
bancarrota que le impide cumplir sus compromisos -financieros o morales.
En tal caso, nos contentaríamos con que nos pagaran entregándonos la
bala con la que mataron al poeta.<br>
Pero no podrán: porque esa bala, es el corazón de Europa.<br>
<br></div></div><br>_______________________________________________<br>Acampada-pallars mailing list<br><a ymailto="mailto:Acampada-pallars@marsupi.org" href="mailto:Acampada-pallars@marsupi.org">Acampada-pallars@marsupi.org</a><br><a href="https://lists.marsupi.org/listinfo/acampada-pallars" target="_blank">https://lists.marsupi.org/listinfo/acampada-pallars</a><br><br><br></div> </div> </div> </div></body></html>